Se recomienda a todos los interesados en el arte maya y también de otras culturas precolombinas esta edición especial No. 37 de Diciembre del 2010 Decoración Corporal Prehispánica donde se muestran ejemplos de tatuajes, pinturas corporeas, orejeras, narigueras entre otros.
Los temas relacionados con la cultura Maya son:
Los temas relacionados con la cultura Maya son:
• Decoración corporal prehispánica
• Pintura corporal
• Pintura facial
• Sellos
• Tatuajes
• Escarificación
• Orejeras
• Pintura facial
• Sellos
• Tatuajes
• Escarificación
• Orejeras
enseguida el contenido de la revista:
Decoración corporal prehispánica
Catálogo Visual
• Decoración corporal prehispánica
• Pintura corporal
• Pintura facial
• Sellos
• Tatuajes
• Escarificación
• Orejeras
• Bezotes
• Narigueras
• Pintura corporal
• Pintura facial
• Sellos
• Tatuajes
• Escarificación
• Orejeras
• Bezotes
• Narigueras
Pintura corporal
En la fiesta de la veintena de tlacaxipehualiztli, los individuos con el cuerpo pintado con rayas blancas y rojas y el rostro negro representaban a los mimixcoa. Primeros Memoriales, f. 250r.
Reprografía: Marco Antonio Pacheco / Raíces
Reprografía: Marco Antonio Pacheco / Raíces
A diferencia de otras prácticas para el adorno utilizadas en la época prehispánica, la de la pintura corporal se distingue por su carácter efímero y porque no estaba restringida a la elite, si bien su uso en ocasiones públicas estaba regido por normas claramente establecidas. Era además una práctica que en cierto sentido escapaba al uso meramente ritual o de identificación social –que tenían en esencia las otras clases de adorno del cuerpo–, pues también se utilizaba cotidianamente.
Texto completo en la edición impresa
Pintura facial
Mujer con el rostro adornado con motivos en forma de cruz,alusivos a los rumbos del universo.
Cultura Centro de Veracruz. Clásico. El Faisán, Veracruz. MNA.
Foto: M.A. Pacheco / Raíces
Mujer con el rostro adornado con motivos en forma de cruz,alusivos a los rumbos del universo.
Cultura Centro de Veracruz. Clásico. El Faisán, Veracruz. MNA.
Foto: M.A. Pacheco / Raíces
En esencia, la pintura facial presenta las mismas características que la corporal en cuanto a su carácter efímero y a que los colores y diseños utilizados tenían significados específicos y debían utilizarse en ocasiones determinadas y por ciertos personajes. En este sentido, la división entre pintura coporal y facial que se presenta en esta edición especial de Arqueología Mexicana es más que nada ilustrativa, aunque hay algunos puntos en relación con el uso de pintura en el rostro que vale la pena señalar.
Texto completo en la edición impresa
Sellos
Recreación de Diego Rivera del proceso de elaboración de tintes y del uso de sellos y pintaderas
para adornar el cuerpo. Pintores y tintoreros (Cultura Tarasca). Grisalla. 1942. Palacio Nacional.
Digitalización Raíces
Recreación de Diego Rivera del proceso de elaboración de tintes y del uso de sellos y pintaderas
para adornar el cuerpo. Pintores y tintoreros (Cultura Tarasca). Grisalla. 1942. Palacio Nacional.
Digitalización Raíces
Un elemento frecuente en los contextos arqueológicos mesoamericanos de prácticamente todos los periodos lo constituyen objetos de barro –aunque se han encontrado unos cuantos ejemplares en piedra– planos o cilíndricos que llevan incisas figuras de diversa índole. Se trata de los llamados sellos (objetos en los que la cara grabada es plana) y pintaderas (aquellos redondos en los que el grabado cubre toda la circuferencia). Generalmente se ha asumido que eran utilizados para estampar los motivos que llevan grabados, y de hecho algunos ejemplares conservaban restos de pigmentos, usualmente negro, blanco, rojo o amarillo.
Texto completo en la edición impresa
Tatuajes
Un artista del Clásico maya elabora un códice, lleva tatuados o pintados glifos en el brazo y la pierna.
El plato en que se encuentra esta escena procede de la región de Nakbé, Guatemala.
Ilustración: Luis Gerardo Alonso / Raíces
Eltatuaje, la técnica por la cual se pinta la piel de manera permanente, es una práctica extendida por el mundo, incluido el México prehispánico. Aunque resulta muy complicado discernir cual de la decoración que se observa en las representaciones de personajes en códices, cerámica y piedra corresponde a pintura corporal o a tatuajes, no existe duda de que esta última era una de las prácticas utilizadas en la época prehispánica para el adorno del cuerpo.
Escarificación
Detalle de la escultura conocida como “la Reina”. Procede de la ciudad maya de Uxmal, Yucatán.
En realidad representa a un personaje relacionado con el maíz; las escarificaciones que lleva en
la mejilla semejan los granos de esa planta. Clásico Terminal. MNA.
Foto: Jorge Pérez de Lara / Raíces
La escarificación es producto de un proceso simple, menos laborioso que el del tatuaje, pero sin duda bastante doloroso. En la época prehispánica para lograrla se hacían heridas o incisiones en la piel, siguiendo un diseño predeterminado, en las que se introducía tierra, carbón o piedras pequeñas, de tal modo que la cicatriz resultante tuviera volumen y en conjunto formara un diseño claramente distinguible. Detalle de la escultura conocida como “la Reina”. Procede de la ciudad maya de Uxmal, Yucatán.
En realidad representa a un personaje relacionado con el maíz; las escarificaciones que lleva en
la mejilla semejan los granos de esa planta. Clásico Terminal. MNA.
Foto: Jorge Pérez de Lara / Raíces
Texto completo en la edición impresa
Orejeras
Representación de un joven maya con orejeras discoidales; usualmente este tipo de orejeras
se elaboraban en jadeíta. Clásico. Tabasco. MCP.
Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces
Representación de un joven maya con orejeras discoidales; usualmente este tipo de orejeras
se elaboraban en jadeíta. Clásico. Tabasco. MCP.
Foto: Marco Antonio Pacheco / Raíces
El portar orejeras es uno de los rasgos distintivos de las elites del área mesoamericana. Se trata de una práctica que se remonta al Preclásico Temprano y llega hasta el momento de la conquista. Para poder llevar orejeras era necesario perforar el lóbulo de la oreja, tal como sucede con la preparación actual para portar aretes, aunque debido a las dimensiones bastante mayores que alcanzaban esos ornamentos en la época prehispánica el ensanchamiento del orificio debió ser progresivo.
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Bezotes
El uso de bezotes era uno de los elementos básicos en el adorno de los gobernantes.
En este retarto del tlatoani mexica Moctezuma Xocoyotzin se observa que lleva uno de oro.
Cuadro atribuido a Antonio Rodríguez, finales del siglo XVII. Museo degli Argenti, Florencia.
El uso de bezotes era uno de los elementos básicos en el adorno de los gobernantes.
En este retarto del tlatoani mexica Moctezuma Xocoyotzin se observa que lleva uno de oro.
Cuadro atribuido a Antonio Rodríguez, finales del siglo XVII. Museo degli Argenti, Florencia.
Digitalización Raíces
Para las sociedades prehispánicas llevar bezote era una señal de dignidad, una manera de hacer patente que se habían conseguido los méritos suficientes para portarlo. No es de extrañar que fuera uno de los ornamentos distintivos de los gobernantes, quienes incluso los usaban con características adecuadas a distintas ocasiones. Ejemplo de ello son los bezotes de oro con forma de cabeza de águila que llevaban como parte de su atuendo como guerreros; varios de los mejores ejemplos conocidos de bezotes muestran esta forma. En el retrato de Nezahualcóyotl vestido para la guerra que aparece en el Códice Ixtlixóchitl, el famoso gobernante texcocano luce uno de ellos.
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Narigueras
Portar nariguera tenía un significado especial; la acción de perforar la aleta nasal constituía un rito (yacaxapotlaliztli) que implicaba que quien la recibía adquiría un estatus determinado. En esta imagen de un códice mixteco se muestra la consagración como gobernante de 8 Venado, Garra de Jaguar. Códice Nuttall, lado 1, lám. 52.
Reprografía: Marco Antonio Pacheco / Raíces
Portar nariguera tenía un significado especial; la acción de perforar la aleta nasal constituía un rito (yacaxapotlaliztli) que implicaba que quien la recibía adquiría un estatus determinado. En esta imagen de un códice mixteco se muestra la consagración como gobernante de 8 Venado, Garra de Jaguar. Códice Nuttall, lado 1, lám. 52.
Reprografía: Marco Antonio Pacheco / Raíces
Como algunas otras prácticas mesoamericanas relacionadas con la modificación del cuerpo humano con el fin de conferirle un significado específico, la del uso de narigueras es una reservada a la elite. De hecho, por lo menos desde el Clásico en adelante, la perforación en la nariz necesaria para colocarla se efectuaba en el marco de una ceremonia que tenía como fin investir a un soberano, el que en esa ocasión recibía insignias que en adelante simbolizarían su condición de gobernante, entre ellas la nariguera.
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